- Aprovecha los momentos en familia. Tómate cinco minutos durante el desayuno, almuerzo o cena para conversar sobre la importancia de las finanzas. Todos los integrantes de la familia deben estar informados.
- Idea un sistema de metas y recompensas. Premia a tu mejor hijo cuando llegue a la meta de ahorro trazada y aconséjale cuando no lo logre. De este modo, se puede armar una lista de incentivos que lo motiven a seguir ahorrando de manera inteligente.
- No te quejes de dinero. Evita hacer comentarios negativos que tengan que ver con dinero. Si lo haces estarás dándole una sobre importancia que puede terminar en comportamientos avaros, mezquinos o derrochadores por parte de tus hijos.